
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
Tirzepatida, ¿Qué, cómo y para? Ficha técnica actualizada en Europa
Autora: Nieves García (Médica especialista en medicina familiar y comunitaria. SAMU. Asturias)
Fecha de publicación: 20/12/2023
Categoría: Novedades



3 minutos
Este post incluye opiniones de su autor. Las partes del texto subrayadas contienen enlaces a la evidencia científica en la que se sustenta.
Entre los fármacos aprobados para el tratamiento de la obesidad se encuentra la tirzepatida, que, al igual que la semaglutida, ha demostrado sus beneficios en reducción del peso en pacientes con sobrepeso y obesidad, independientemente de la glucemia, lo que le ha valido la aprobación para dicha indicación por parte de la FDA y de la EMA.
¿QUÉ ES?
Se trata de un análogo del polipéptido inhibidor gástrico (GIP), hormona que estimula la liberación de insulina, y actúa como agonista dual a nivel del receptor de GIP y del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1, es decir, también funciona como un análogo GLP1 (ar-GLP1).
Los receptores de GIP y de GLP-1 se encuentran presentes en células endocrinas del páncreas, cerebro, corazón, vasos sanguíneos, leucocitos, intestino y riñón. Además, los receptores GIP también están presentes en los adipocitos.
MECANISMO DE ACCIÓN
Gracias a su acción dual agonista mejora el control glucémico, al reducir las concentraciones de glucosa en ayunas y posprandiales, en pacientes con DM tipo 2, aumentando la secreción de insulina dependiente de la glucosa, es decir, aumentando la sensibilidad de las células β pancreáticas a la glucosa. Además, mejora la sensibilidad a la insulina y reduce el peso corporal, lo que también contribuye a la mejora de la sensibilidad a la insulina. También reduce las concentraciones de glucagón (hiperglucemiante) en ayunas y posprandiales, de forma dependiente a la glucosa, y retrasa el vaciado gástrico, ralentizando la absorción de glucosa tras las comidas, lo que produce un efecto beneficioso a nivel de la glucemia posprandial.
Entre otros efectos que justifican su acción en la pérdida de peso, debemos tener en cuenta que los receptores GIP y GLP-1 se expresan en el cerebro y son importantes para la regulación del apetito. El fármaco aumenta la sensación de saciedad, plenitud y disminuye la sensación de hambre, lo que le permite reducir el peso corporal y la masa grasa corporal.
El fármaco alcanza su concentración máxima a las 8-72 horas de su administración. Su biodisponibilidad es del 80%. La tirzepatida está altamente unida a la albúmina en plasma. Su metabolización es por escisión proteolítica, y su vía de eliminación es por orina y por heces, como principales vías de excreción. Su semivida (recordemos, el tiempo que tarda una molécula en reducir su concentración a la mitad) es de aproximadamente 5 días.
SU EVIDENCIA CIENTÍFICA
GLUCEMIA: serie de estudios SURPASS 1 al 5. Su objetivo principal fue el control glucémico, y en todos los estudios se alcanzaron reducciones sostenidas significativas y clínicamente relevantes de la HbA1c respecto a basal, en comparación con placebo y con otros fármacos, como la insulina glargina, degludec y la semaglutida. Estos estudios también demostraron que la molécula mantenía sus efectos al menos 2 años. Aunque no era su objetivo principal, también se demostró una significativa, y clínicamente relevante, pérdida de peso corporal.
PÉRDIDA DE PESO: serie de estudios SURMOUNT 1 al 4. Su objetivo principal era la disminución del peso en pacientes con sobrepeso/obesidad con un IMC ≥ 27 Kg/m2. Demostraron que la tirzepatidatenía una gran potencia, con reducciones significativas y sostenidas, respecto a placebo.
¿PARA QUE SIRVE?
Actualmente, la Agencia Europea del Medicamento ha revisado los datos presentados por el titular de la autorización de comercialización, y considera una nueva indicación terapéutica que aporta un beneficio clínico significativo en comparación con los tratamientos existentes, tal como se explica de forma más completa en el informe público europeo de evaluación. Así, en ficha técnica europea, actualmente presenta las siguientes indicaciones:
Tratamiento de la DM tipo 2 no suficientemente controlada con dieta y ejercicio, bien en monoterapia cuando la metformina no se tolera o está contraindicada, o bien como tratamiento coadyuvante.
Tratamiento para control del peso en aquellos pacientes con obesidad definida como IMC ≥ 30 Kg/m2 o aquellos con sobrepeso, definido como IMC ≥ 27 y < 30 Kg/m2. En este último caso, debe existir al menos una comorbilidad cardiovascular relacionada con el peso.
Por tanto, recogida en ficha técnica europea la indicación para el tratamiento de la obesidad, independientemente de la glucemia. Por tanto, disponemos de otro fármaco que se añade a los ya existentes, ampliando nuestro arsenal terapéutico con la molécula, hasta la fecha, más potente en la pérdida de peso.
¿CÓMO SE ADMINISTRA?
Se presenta como fármaco inyectable subcutaneo con pluma de dosis única precargada en diferentes dosis, que van desde los 2,5 mg hasta los 15 mg (con incrementos de 2.5 mg en 2.5 mg). Se puede inyectar en abdomen, muslo o parte superior del brazo, y se deben rotar las zonas de administración en cada dosis y no hacer coincidir con la zona de inyección de otros fármacos inyectables. El tratamiento es semanal, se inicia con dosis bajas para comprobar la tolerancia. Los incrementos de dosis son de 2.5 mg a 2.5 mg, con un mínimo de 4 semanas entre ellos. La dosis máxima permitida es 15 mg semanales. Debemos recordar que la dosis de inicio de 2.5 mg no es eficaz para el control glucémico ni para el control ponderal, es decir, solo está destinada a comprobar la tolerancia e iniciar el escalado de dosis. La dosis de mantenimiento es de 5, 10 o 15 mg, dependiendo de la tolerancia del paciente.
En caso de olvido de dosis, se puede administrar en los 4 días siguientes, pero transcurrido este tiempo, se recomienda omitir la dosis olvidada. Si se desea cambiar el día de administración, se debe esperar un mínimo de 3 días para la siguiente dosis.
INTERACCIONES. GRUPOS POBLACIONALES.
No requiere ajuste de dosis en insuficiencia renal ni hepática, por tanto, se puede administrar en cualquier etapa, ahora bien, en insuficiencia renal grave y fase terminal, al igual que en la insuficiencia hepática grave, la evidencia científica es limitada.
Se puede asociar a otros fármacos para el control de la DM tipo 2 (no está indicado en DM tipo 1), pero en caso de tratamiento previo con sulfonilurea y/o insulina, se recomienda reducir la dosis de estos fármacos secretagogos, para reducir el riesgo de hipoglucemia.
El fármaco, por el momento, está indicado en población adulta, sin datos en menores de 18 años. No se indica en mujer embarazada ni en lactantes, por falta de datos. Tampoco hay evidencia relevante en población con ≥ 85 años.
En caso de utilizarlo para el control ponderal, debe evitarse la combinación con otros ar-GLP1.
Debido al efecto del fármaco en el vaciado gástrico (recordemos que lo retrasa), se recomienda realizar una vigilancia estrecha en aquellos pacientes que estén tomando fármacos orales con un margen terapéutico estrecho, como la digoxina y los anticoagulantes antivitamina K. Igualmente, si utilizamos fármacos orales con una acción terapéutica rápida, debemos asumir un retraso de su efecto.
PRECAUCIONES
PANCREATITIS AGUDA: El fármaco no se ha estudiado en pacientes con antecedentes de pancreatitis, por lo que, al igual que con la semaglutida, debe usarse con precaución. Si se han descrito casos de pancreatitis aguda con el fármaco, que lógicamente, obligan a su supresión y no reanudación posterior.
HIPOGLUCEMIA: precaución cuando se usa con insulina o un secretagogo de insulina. Lo más adecuado es reducir la dosis de la insulina o sulfanilurea.
GASTROINTESTINALES: al igual que la semaglutida, su principal problema es la falta de tolerancia por efectos gastrointestinales. Por ello, es fundamental la titulación de la dosis, partiendo de los 2.5 mg semanales (no terapéuticos).
RETINOPATÍA: no hay información al respecto, pero se recomienda precaución en pacientes con retinopatía diabética.
¿Y LA MORTALIDAD CARDIOVASCULAR?
Se presupone que un fármaco que reduzca el peso y la masa grasa adecuadamente, sin problemas relevantes de seguridad, debería favorecer un mejor control de otros factores de riesgo cardiovascular (CV). Añadiendo este hecho con la pérdida de peso que genera, se esperaría una reducción de la morbimortalidad CV. Aunque no disponemos de resultados de los estudios de morbimortalidad CV, si disponemos de información sobre su seguridad CV, según metaanálisis.
¿CUÁL ES MEJOR, SEMAGLUTIDA O TIRZEPATIDA?
Aquí aportamos datos y nuestra visión

Ilustración 1. Nueva ficha técnica de Tirzepatida