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CARDIOPATÍA ISQUÉMICA

Leche entera y salud cardiovascular

Autor: Javier Ángel Rodríguez Calvillo (Médico especialista en medicina familiar y comunitaria. CS Sangonera la Verde. Murcia)

Fecha de publicación: 19/07/2023

Categoría: Controversia

3 minutos

Este post incluye opiniones de su autor. Las partes del texto subrayadas contienen enlaces a la evidencia científica en la que se sustenta.


Un factor relevante implicado en eventos cardiovasculares (CV) futuros, incluida la muerte, son las dietas poco saludables. Los análisis nutricionales tienen en cuenta la repercusión de los alimentos y dietas en la salud CV.


Los últimos estudios han cuestionado recomendaciones tradicionales sobre determinados alimentos, considerados dañinos a nivel CV, como los productos lácteos con grasa entera. Se consideraban perjudiciales por inducir un incremento de los niveles de c-LDL. Ahora bien, su efecto sobre los niveles de colesterol sería modesto y no generaría incremento de la ApoB y de las partículas de LDL densas y pequeñas. La evidencia más reciente considera estos alimentos neutros o protectores a nivel CV.


Un estudio publicado en European Heart Journal estableció la protección CV de determinadas categorías de alimentos, analizando 6 grandes estudios (dos de casos y controles, y cuatro prospectivos de cohortes internacionales), con un total de 244597 pacientes de 80 países diferentes de los 6 continentes.


El estudio utilizó el sistema de puntuación de dieta saludable del estudio PURE (Prospective Urban Rural Epidemiology), que tiene mejor capacidad predictora de eventos compuestos CV que otros sistemas de puntuación (dieta mediterránea, DASH…). Relacionó la puntuación con los eventos CV (la mortalidad por todas las causas y los eventos CV mayores -infarto de miocardio no mortal, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca y mortalidad CV-).


6 grupos de alimentos fueron analizados: frutas, verduras, frutos secos, legumbres, pescado y se añadieron los productos lácteos con grasa entera. Para cada grupo, si el consumo auto-notificado era superior a la mediana, se puntuaba con un 1, y si era inferior, con un 0.


Concluyeron que la dieta compuesta de mayores cantidades de frutas, verduras, nueces, legumbres, pescado y productos lácteos con grasa entera se asociaban con menos eventos CV y mortalidad. Por tanto, un consumo más bajo de estos grupos de alimentos, incluidos los productos lácteos con grasas enteras, se asociaría a un mayor riesgo.


Los autores recomiendan dietas que incluyan alimentos naturales diversos en cantidades moderadas, en vez de patrones nutricionales restringidos a un pequeño número de categorías alimenticias. Según concluyen en el estudio, una ingesta inadecuada de alimentos saludables clave es más problemático para la salud CV que la ingesta de algunos alimentos o nutrientes con grasa entera.


Los resultados fueron consistentes tanto en individuos con o sin enfermedad CV, y en todas las regiones del mundo, aunque fueron más contundentes en los países con ingresos más bajos (y menor consumo de los alimentos naturales).


El patrón de alimentación recomendable sería:

  • 2-3 porciones de fruta diarias

  • 2-3 porciones de verduras diarias

  • 3-4 servicios de legumbres semanales

  • 7 porciones de frutos secos semanales

  • 2-3 porciones de pescado semanal

  • Leche entera diariamente, con 14 servicios semanales

  • Granos enteros en cantidades moderada como una porción al día

  • Carne sin procesar en cantidades moderadas, una porción al día (carne roja cocida o aves de corral).


Entre las limitaciones del estudio destacamos: la inclusión de estudios observacionales, los datos de las dietas que eran auto-notificados y no todos se reconfirmaban, y la ausencia de información sobre los tipos de frutas y verduras que formaban parte de la dieta (se va conociendo el efecto más beneficioso en la salud CV de algunos tipos de frutas y verduras que contienen polifenoles)

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Ilustración 1. CARPRIMARIA

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